Pablo Gómez, ingeniero informático de 32 años, fue ingresado en el Hospital Clinic de Barcelona con una amputación de los cinco dedos de la mano derecha, según él, causado por él mismo para no soportar la presión de novia, amigos y familiares para que se hiciera cargo de la reparación y mantenimiento de sus ordenadores. Según los médicos "Los dedos no pudieron ser recuperados, ya que al ver que iban a ser reimplantados prefirió comérselos en un descuido de los enfermeros".
"Era su última escapatoria"
Al parecer el joven realizó el acto en un momento de extrema ansiedad, al ser requerido por varias personas a dejar sus obligaciones para encargarse de: abrir puertos del router, instalar programas piratas, limpiar virus, etc... Ni siquiera sus súplicas alegando que él mismo pagó porque le instalaran Windows Vista y que le asqueaba algo que nunca fue su trabajo parecían hacer mella en los requerimientos.
Camiseta que llevaba el joven ingresado
"No lo esperábamos"
En la puerta del hospital se encontraban esta tarde varios amigos y familiares, portando varios portátiles, CD's y hasta una impresora y un PC en un carrito de la compra, informándose sobre el estado de salud del paciente. Una amiga dijo: "Llevo aquí 4 horas esperado a ver si cuando salga me puede acabar de limpiarme un virus, aunque sea con la mano izquierda, porque este viernes tengo que entregar un trabajo. Creo que ha sido un poco egoísta al cortarse los dedos.". Un cuñado allí presente manifestó que "el tío pretendía que me leyera un manual, encima que le hacía un favor porque le gustan estas cosas. Además siempre me decía que estaba ocupado y tal. No se qué les enseñan en la facultad pero desde luego no les enseñan altruismo".
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