Ocurrió esta mañana cuando nuestro equipo se desplazó en taxi para cubrir una resaca de Fin de Año. Al parecer el taxista F.R.C. (ha querido mantener su anonimato por razones obvias) es taxista y no es de derechas.
Indicios claros
El equipo de El Correos empezó a sospechar al notar que la emisora sintonizada en la radio se trataba de la cadena SER. También observó un diario enrollado bajo su asiento que correspodia a El País. Al ser preguntado si se lo había olvidado algún cliente el taxista contestó con aparente normalidad que no,que era su diario. A continuación le realizamos algunas sencillas preguntas sobre la cantidad de inmigrantes en las calles y si el actual presidente se estaba encargando de hundir el país, F.R.C. contestó con animosa normalidad y sin espetar ni insultos ni tacos.
F.R.C. en su taxi
Al identificarse como periodistas, y comprobar que el conductor era realmente el hombre que consta en la licencia y no un ladrón que hubiera robado el coche, F.R.C. fue felicitado por su condición a lo que éste contestó que "No se piensen que soy solo yo. Somos una minoría que vivimos casi en la clandestinidad y por eso no nos damos mucho a conocer".
Ley Omnibús
Respecto a la ley de desregulación del transporte de viajeros que estos días está causando gran revuelo en el sector, F.R.C. contestó que "siempre duele cuando se elimina un monopolio y hay protestas, pero hay que ver a nivel global si beneficia a la sociedad o no", y que las protestas se debian a que "cuando compras una licencia por 150,000€ en el mercado negro es lo que pasa. Es como si compras una entrada en la reventa por diez veces su valor y luego cancelan el concierto. Te jodes.". Antes estas declaraciones nuestro equipo decidió decirle que parara para terminar la carrera, aunte la sospecha fundada de que en realidad se trataba de un posible psicópata.
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